Vacaciones originales en un faro



Pronto llegarán las ansiadas vacaciones de Semana Santa y, si no eres una de las afortunadas que puedan disfrutar de esas vacaciones, tranquila que cuando menos te lo esperes llegan las de verano. Si quieres pasarla genial y tener unas vacaciones originales, tranquilas y magníficas, alojarse en un faro es una maravillosa opción.

Esta alternativa no es muy usual y es bastante desconocida. Existen alojamientos fantásticos en España y en Europa. Aquí tenéis información sobre algunos de los lugares más bonitos, emblemáticos y asequibles.

Faro en Alnes, Noruega




La isla noruega de Godoya, famosa por sus hermosos paisajes, alberga un encantador faro que siempre figura entre los más visitados de Noruega; hablamos del Faro de Alnes, que lleva guiando a los pescadores de bacalao que faenan en la costa oeste desde 1876.
Automatizado en el año 1982, el faro se ha convertido en el principal reclamo turístico de Alnes, un pequeño pueblo de pescadores

El O Semáforo, está situado en el cabo de Finisterre (Fisterra, en gallego). Tiene cuatro habitaciones dobles y una simple en un edificio anexo a la linterna. Un lugar mágico, lleno de leyendas y de paso de peregrinos del Camino de Santiago.

Situado en Estbourne, a 2 horas de Londres en coche. Las habitaciones de Belle Tout Lighthouse son temáticas. 





El Faro de Fatouville Grestain, ofrece cinco habitaciones magníficas y con una decoración exquisita. 

A 169 metros sobre el nivel del mar, el faro de Sant Sebastià (1857) es un mirador como hay pocos en la Costa Brava. Desde aquí dominamos a vista de gaviota los potentes acantilados entre los que se acomodan las calas de Llafranc y Calella. Junto al faro se conserva una antigua casa de postas del siglo XVIII que daba servicio al camino de Francia por la costa.

Como podrás ver estos faros son maravillosos y así da gusto irse de vacaciones por Europa.